la metodología de Design Thinking en procesos de diseño urbano, como una herramienta procedimental útil para orientarlos de manera situada en el territorio y de forma innovadora frente a desafíos complejos, y que permite el aprendizaje durante el proceso mediante la acción reflexiva. El estudio se basa en el análisis de la experiencia de diseñadores y académicos involucrados en proyectos desarrollados en el marco del Magíster en Diseño de Ciudades Integradas (MDCI) de la Universidad Viña del Mar, Chile (2019-2020), quienes implementaron la metodología bajo la hipótesis de que esta es una herramienta innovadora en tres aspectos: la empatización, la iteración y la escalabilidad. La metodología de investigación es cualitativa del tipo fenomenológica, analiza las experiencias comunes y distintas de los profesionales. Estas se evaluaron mediante entrevistas grupales. El análisis de los datos se desplegó a través de métodos de codificación basados en la teoría fundamentada (Grounded Theory), identificando experiencias relevantes para el proceso de diseño urbano que promuevan la capacidad de innovación en proyectos de este tipo. Se identificaron nueve dimensiones de innovación relevantes, en tanto el Design Thinking 1) se enfoca en el proceso mismo y no necesariamente en el proyecto final, promoviendo el conocimiento situado mediante la experimentación basada en artefactos y experiencias; 2) origina interrogaciones constantes y el aprendizaje durante el proceso de iteración, situando al diseñador como un facilitador; 3) impulsa formas de gobernanza local para un problema específico, incorporando diversos enfoques experienciales a la hora de abordar el problema urbano.