En este artículo, el autor analiza dos obras de Liutprando de Cremona, la Antapodosis y la Relatio de legatione constantinopolitana, desde la perspectiva del relato de viaje, resaltando el recurso retórico que permanentemente se hace presente en la obra de Liutprando, y que no tiene que ver con un cambio sustancial que se haya operado en Constantinopla entre 949 y 968, sino con que el sujeto escribiente ha mutado: de diácono en obispo, de legado de poco rango a legado imperial. El -egocentrismo histórico‖ comparece en esta retórica que busca, primero, denostar un rey exaltando al emperador griego y, después, denostar al emperador bizantino para exaltar a los Otones. Es la retórica del desquite.