doi 10.4067/S0718-83582015000100001

 

Paisajes en emergencia: transformación, adaptación, resiliencia

 

Osvaldo Moreno Flores1

1 Chile. Arquitecto Universidad de Chile. Magister en Paisaje, Medioambiente y Ciudad. Doctorando en Arquitectura y Urbanismo, UNLP. Profesor asistente, Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad de Chile. Profesor asistente adjunto, Facultad de Arquitectura Diseño y Estudios Urbanos, Pontificia Universidad Católica de Chile.


 

Si durante los últimos veinte años los discursos asociados a la ciudad han instalado la noción de sustentabilidad como principal propósito y motivo de investigaciones, estudios y proyectos, hoy es el concepto de resiliencia el que centra la atención de académicos, planificadores, autoridades y, también, de una ciudadanía cada vez más activa y empoderada. Ello puede constatarse en los diversos informes y reportes oficiales de organismos internacionales tales como el PNUD, el Banco Mundial y la CEPAL, así como también en el creciente volumen de investigaciones científicas de distintas disciplinas que abordan temáticas de resiliencia en ciudades y asentamientos humanos. Sin duda, este número de Revista INVI contribuye a ejemplificar este asunto.

En términos generales el concepto de resiliencia refiere a la capacidad de un organismo o sistema de adaptarse y asumir flexibilidad en situaciones límite, para sobreponerse a ellas2. Resiliencia es un término utilizado recientemente como estrategia por las Naciones Unidas para la reducción de riesgo en comunidades, en su dimensión tanto cultural como material, teniendo la premisa de resistir o generar adaptación de tal forma que ésta siga exhibiendo un nivel aceptable de funcionamiento. El nivel estaría determinado por el grado en que cada sistema social es capaz de organizarse a sí mismo y la habilidad de incrementar su capacidad de aprender y adaptarse, incluyendo la capacidad de recuperarse de un desastre3.

El nivel de presión al cual se encuentran sometidos hoy los territorios urbanos y periurbanos - especialmente en nuestro contexto latinoamericano - debido a factores socioculturales, demográficos, económicos y ambientales, argumenta este cambio de énfasis conceptual desde la noción de sustentabilidad, hacia el de resiliencia. De esta forma, ya no se habla sólo de articular la dimensión de la equidad social, la integridad ecológica y la competitividad económica en los planes territoriales y proyectos urbanos, sino que ante constantes escenarios de cambios, crisis y desastres socionaturales4, la ideas de adaptabilidad, resistencia y regeneración aparecen como nuevos vectores a gestionar, planificar y proyectar en torno a las ciudades.

El paisaje urbano, entonces, se asume como un paisaje en emergencia, entendido desde una doble consideración: por un lado, la emergencia, asociada al estado de alerta que supone un inmediato riesgo para la salud, la vida o la propiedad de individuos y comunidades. Ello, demanda intervención urgente para atender la situación, prevenir y evitar su empeoramiento; por otra parte, la emergencia como concepto vinculado a lo emergente, referido al surgimiento de elementos, sistemas, procesos o actores en un determinado contexto, los que aportan soluciones a problemáticas y demandas existentes.

La noción de paisaje, como denominador común para ambas acepciones, se plantea desde una posición intermedia, híbrida y mestiza, que articula lo ecológico y lo sociocultural en una dinámica que posibilita una lectura, interpretación y proyectación del territorio. Esa dinámica, acorde a los complejos desafíos que supone la atención a las actuales problemáticas asociadas a los cambios, crisis y desastres que afectan a diversos escenarios y contextos. A su vez, permite establecer un diálogo integrador entre disciplinas que por mucho tiempo – incluso siglos mediante – han transitado senderos paralelos e inconexos5. Desde el andamiaje teórico, epistemológico y experiencial de lo paisajístico, las ciencias ambientales, las ciencias humanas, las disciplinas del arte y del diseño, encuentran vasos comunicantes cada vez más trascendentes y sinérgicos.

Aun cuando los diversos artículos contenidos en este número de Revista INVI difieren en cuanto a la especificidad de sus temáticas, de los casos de estudio y de la procedencia de sus autores, un denominador común que se encuentra en ellos hace referencia a esta idea de paisaje en emergencia. Sea para indagar acerca de procesos complejos de adaptabilidad y cambio de individuos o grupos en territorios sujetos a transformación, o para referir a los patrones de respuesta ante problemáticas y desastres desde los cuales emergen condiciones de resiliencia.

En primer lugar, en el artículo de Villagra y Felsenhardt, titulado «El paisaje urbano de emergencia en Valdivia, Chile: contribuciones a la planificación y diseño urbano post-desastre para la restauración», las autoras abordan las relaciones entre los aspectos físicos y sociales del paisaje, que surgen en el contexto del desastre, tomando como referencia el escenario de emergencia post terremoto y tsunami del 2010. Estas relaciones determinan la manera de percibir y habitar los diversos componentes del paisaje urbano, a partir de categorías de uso asociadas entre otras al refugio o la evacuación y diversas dimensiones relacionales, como la legibilidad y la contención. Con estas indagaciones se define un modelo conceptual de paisaje urbano de emergencia que según las autoras revela el rol del espacio abierto en las ciudades expuestas a desastres, planteando estrategias para nutrir su planificación y diseño urbano.

Luego, Contreras y Beltrán en su artículo «Reconstruir con capacidad de resiliencia: El casco histórico de la ciudad de Constitución y el sitio del desastre del terremoto y tsunami del 27 de febrero 2010», plantean el análisis acerca de las problemáticas del proceso de reconstrucción que acontece en una de las ciudades más impactadas por el evento del 2010, centrando la discusión en los alcances del proceso, en los cambios relevantes que ha evidenciado la estructura urbana - especialmente en la zona de borde hacia el río - y en el valor de los predios. A partir de este estudio, se estima que la persistencia de tejido urbano y viviendas en deterioro, debido a distintos factores político-administrativos y técnicos, sumado a la relocalización forzada de determinados grupos sociales, promueve condiciones de gentrificación y destrucción del tejido sociocultural, afectando con ello la resiliencia de la ciudad y la posibilidad de una efectiva planificación territorial.

En tercer lugar, el artículo de Lombard titulado «Lugarización y la construcción de asentamientos informales en México», reflexiona en torno a la influencia que ejerce la construcción discursiva sobre los asentamientos informales en la propia marginalización de dichos asentamientos, con efectos tangibles para sus habitantes. A partir de este argumento y apuntando a desestabilizar estos discursos de marginalización, se plantea un enfoque de ‘lugarización’, indagando sobre experiencias locales en dos colonias populares de Xalapa, las cuales si bien reproducen y perjudican la categorización binaria sobre la ‘informalidad’, revelan también posibilidades para replantear los asentamientos informales.

A continuación, Sepúlveda y Vela abordan en su artículo «Cultura y hábitat residencial: el caso mapuche» un enfoque metodológico para caracterizar el ‘hábitat residencial’ según la cultura que lo alberga, tomando como caso de estudio una muestra de familias Mapuche en la comuna de Padre Las Casas, en la Región de la Araucanía. A partir del estudio, si bien se constata la existencia de una mirada occidental ‘huinca’6 sobre la cosmovisión mapuche, según los autores ha sido posible evidenciar realidades vinculadas a una gran cohesión afectiva entre los integrantes de las familias y una estrecha relación cultural con el territorio habitado, develando una compleja lógica de identidad y arraigo territorial que caracteriza y determina las cualidades del hábitat residencial mapuche. Asimismo, la investigación ha permitido corroborar que la integración de métodos y técnicas de las Ciencias Humanas - específicamente de la sociología, antropología y etnografía - sumados a los propios de la arquitectura, conduce al investigador a profundizar con mayor sensibilidad y sutileza para identificar la cultura del habitante, sus patrones y procesos.

En tanto, Estévez en su artículo «Microfinance and housing for immigrants in the U.S.A.: a sustainable tool» estudia la problemática de acceso a la vivienda para determinados grupos sociales de bajos ingresos, en particular los inmigrantes de Estados Unidos, en barrios que han sido objeto de proyectos de revitalización. Si bien en ese país existe una importante experiencia en materia de revitalización y desarrollo de barrios caracterizados por anteriores estados de deterioro y problemas de habitabilidad, las actuales oportunidades y condiciones para el financiamiento de viviendas están demostrando ser inaccesibles para importantes grupos sociales, como es el caso de los inmigrantes. Según el autor, la revitalización de barrios mediante la renovación del stock de viviendas genera una serie de beneficios vinculados a la creación de oportunidades de desarrollo social, de disminución del consumo de suelo, de ahorro energético y de otros recursos, promoviendo de esta forma el desarrollo sustentable y la resiliencia de territorios y comunidades. Al respecto, el artículo indaga sobre la atención a los problemas relacionados con el acceso a la vivienda, presentando un análisis de las características claves de un programa de microfinanciamiento para la vivienda que se ha implementado desde el año 2000 en algunos de los condados más pobres de Texas, en la frontera entre Estados Unidos y México, el cual puede constituir una base para formular e implementar programas similares en otros lugares que lo requieran.

Por último, la opinión de Garay titulado «Viviendas de emergencia: reflexiones a partir de la experiencia del terremoto del 27F» analiza las graves carencias en la preparación y capacitación del país frente a desastres, tras las experiencias del terremoto y tsunami del 2010, del terremoto en el norte Grande y el incendio en Valparaíso, ambos de abril de 2014. Centra la atención en los cuerpos legales y normativos conducentes a responder frente a la emergencia, así como también en la calidad de las viviendas entregadas, concluyendo que no existe un régimen legal que comprometa calidad bajo criterios mínimos de habitabilidad, quedando supeditado a consideraciones de orden económico. En tal sentido, la autora señala que el aseguramiento de calidad de la vivienda, así como procedimientos frente a desastres para la habilitación de aldeas o campamentos que aseguren condiciones mínimas, requiere de planificación, reglamentación e implementación, para evitar nuevas improvisaciones y errores.

En suma, las investigaciones expresadas en los artículos que reúne este número constituyen una importante referencia en materia de análisis y evaluación de paisajes en emergencia, abarcando diversas escalas y aristas de casos localizados en contextos territoriales de acelerados y constantes cambios sociales, políticos, económicos, culturales y ambientales.

 

Notas

2Moreno, 2012-2013.
3Kreimer, Arnold y Carlin, 2003.
4Romero, Fuentes y Smith, 2010.
5Nogué, 2010.
6Huinca es el término usado por los mapuche para referirse a los conquistadores españoles.

 

Bibliografía

KREIMER, Alcira, ed.; ARNOLD, Margaret, ed. y CARLIN, Anne, ed. Building safer cities. the future of disaster risk. [En línea]. Washington, D.C. The World Bank. 2003. ISBN: 978-0-8213-5497-1. Disponible en: http://dx.doi.org/10.1596/0-8213-5497-3

MORENO, Osvaldo. Paisaje, riesgo, resiliencia. La arquitectura del paisaje en la modelación sustentable del territorio. Revista Forum de Sostenibilidad. (6): 17-30, 2012-2013. ISSN: 1887-9810.

NOGUÉ, Joan. El retorno al paisaje. [En línea]. Enrahonar: Quaderns de filosofía. (45): 123-136, 2010. ISSN 2014-881X. Disponible en: http://revistes.uab.cat/enrahonar/article/view/v45-mizrahi/203

ROMERO, Hugo; FUENTES, Claudio y SMITH, Pamela. Dimensiones geográficas territoriales, institucionales y sociales del terremoto de Chile del 27 de febrero del 2010. [En línea]. Cuadernos de Geografía. Revista Colombiana de Geografía. (19): 137-152, 2010. ISSN 2256-5442. Disponible en:http://www.revistas.unal.edu.co/index.php/rcg/article/view/16861/17731